Certificación Energética

El proceso de Certificación Energética de un inmueble es una labor compleja que, en esencia, exige:
-Una o más visitas de inspección al inmueble a certificar.
-La utilización de aparataje específico para el cálculo exacto.
-La medición detallada del inmueble.
-Se recopilarán los datos administrativos y catastrales del inmueble, de los materiales componentes, de sus fachadas y cerramientos.
-Se recopilarán los datos del consumo eléctrico y de gas del inmueble durante el último año.
-El cálculo de la eficiencia energética del inmueble antes analizado, será realizado por personal técnico titulado, con formación específica.
-La elaboración de un exhaustivo informe en el que se cuantifica y justifica la asignación a la vivienda, local u oficina de una determinada etiqueta energética (A-B-C-D-E-F-G)
-La proposición de alternativas para la mejora de la etiqueta energética del inmueble en uno o dos grados.
-La entrega al cliente de dos copias del certificado energético que recoge todos los datos anteriores y que es válido para los siguientes diez años.
Si no se sigue este concienzudo proceso y/o el técnico certificador no cuenta con la formación adecuada, el cálculo asignará a la envolvente del edificio unos valores estimados mucho más desfavorables que los reales. Y el resultado será que el resultado de la calificación, aunque sea legalmente admisible, penalizará a su inmueble con una etiqueta que podría haber sido mejor realizando cálculos más afinados.